Con un Rolex en la muñeca, Joe Biden se expone a las críticas
Joe Biden presta juramento como presidente de EE UU el 20 de enero de 2021. Keystone / Saul Loeb / Pool
Durante su investidura, el nuevo presidente de Estados Unidos, Joe Biden, llevaba un Rolex. La elección de esta marca de relojes, que se ha convertido en un símbolo de lujo e incluso de ostentación, suscitó críticas entre los medios de comunicación nacionales e internacionales. Pero no es el primer hombre poderoso del mundo que provoca polémica por sus elecciones relojeras.
Este contenido fue publicado el 30 enero 2021 - 08:00
El 20 de enero, Joe Biden prestó juramento en Washington, D.C., convirtiéndose en el 46º presidente de Estados Unidos. Lo hizo colocando su mano izquierda sobre la Biblia familiar. Aquellos que observaron atentamente esta escena, que fue retransmitida por la televisión en todo el mundo, advirtieron que un reloj suizo rodeaba la muñeca presidencial. Más concretamente, un Rolex Datejust de acero azul.
Los relojes de los presidentes
La elección de este reloj ha sido muy comentada. En los foros de aficionados a la relojería, por supuesto, pero no solamente. Prestigiosos medios de comunicación también se hicieron eco. Así, en un artículo dedicado al tema, el New York TimesEnlace externo calificó a Biden de Watch Geek in Chief . En cuanto a Le FigaroEnlace externo, en un artículo titulado “El desde ahora presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se ofrece un Rolex”, se preguntaba si un nuevo empleo implicaba un nuevo reloj.
Desde que salieron de los bolsillos para ser exhibidos en las muñecas, los relojes han estado expuestos al público. El primer presidente estadounidense que llevó un reloj de pulsera fue Franklin Delano Roosevelt (1933-1945). Desde entonces, los gustos de los presidentes en materia de relojería han sido analizados y comentados regularmente.
En primer lugar, se constata que los presidentes han llevado con mucha frecuencia relojes suizos. Y entre ellos, hay dos marcas que parecen ser especialmente apreciadas y que pueden ser calificadas de “los relojes de los presidentes”.
La primera es Vulcain, originaria de Le Locle, en el cantón de Neuchâtel. Su modelo ‘Cricket’, que incorporaba una alarma mecánica, fue llevado con mucha regularidad por los presidentes Truman, Eisenhower, Johnson y Nixon. Incluso hoy, la marca ofrece aún un reloj a cada nuevo inquilino de la Casa Blanca.
La otra marca que acompaña a muchos presidentes estadounidenses es Rolex. El primero en llevar uno fue Eisenhower (1953-1961). Pero también lo hicieron Kennedy, Johnson, Reagan y, más recientemente, Donald Trump.
Dwight D. Eisenhower fue el primer presidente de EE UU en llevar un Rolex. White House Photograph Office
Cuestión de imagen
Por lo tanto, la elección de Joe Biden no es a primera vista incongruente. Comparado con las finas piezas de relojería que lleva Vladimir Putin, el reloj del nuevo presidente estadounidense parece incluso “modesto”. Fabricado en acero, el modelo visto en la inauguración cuesta 7 500 francos, según la configuración realizada en la web de Rolex, lo que no es nada extravagante para el hombre que está a la cabeza de la primera potencia mundial.
Sin embargo, Rolex es también -y quizá, sobre todo- una cuestión de imagen. Aunque hay relojes mucho más caros y prestigiosos, la marca ginebrina aparece a menudo como símbolo de lujo ostentoso. Llevar uno de estos relojes se presta rápidamente a la crítica, especialmente en tiempos de dificultades económicas.
El ejemplo más famoso de este problema está ligado a Nicolas Sarkozy. A menudo asociado a una imagen de bling-bling, el expresidente francés había sido criticado por llevar un cronógrafo Rolex Daytona. Queriendo justificar la elección del presidente, el célebre publicista Jacques Séguéla echó más leña al fuego al declarar: “Si a los 50 años no se tiene un Rolex, la vida ha sido un fracaso”. La fraseEnlace externo fue muy popular y ha permanecido en la memoria desde entonces.
Perfil bajo
En Francia, los sucesores de Nicolas Sarkozy parecen haber aprendido la lección. Así, François Hollande se exhibía con un simple Swatch de cien euros. En cuanto al actual presidente, Emmanuel Macron, está a favor de las producciones nacionales, por ejemplo, un reloj LIP con brazalete de la OTAN con los colores de Francia.
También en Estados Unidos, a excepción de Donald Trump, los últimos presidentes han mantenido un perfil bajo en cuanto a la relojería de lujo. Bill Clinton y George W. Bush llevaban relojes Timex, una marca estadounidense de baja gama. En cuanto a Barack Obama, llevaba un TAGHeuer suizo antes de su candidatura, y luego un Jorg Gray estadounidense ofrecido por los servicios secretos durante sus mandatos. Cabe destacar que desde que abandonó el despacho oval, el expresidente se ha dejado ver con un Rolex Cellini, uno de los modelos más caros de la marca ginebrina.
Por lo tanto, para un presidente, un reloj es también, de alguna manera, un programa político. Antes de su elección, Joe Biden era visto regularmente con relojes Omega, Seiko y Apple. Queda por ver qué reloj será su favorito como presidente. ¿Por qué no el Apple Watch? Es estadounidense y parece decididamente moderno. Sin embargo, hay un problema: no es seguro que un producto fabricado en China esté realmente de moda en la Casa Blanca.
El reloj de 1 millón de euros de Conor McGregor
Por todos es sabida la pasión de Conor McGregor por los relojes. Rolex, Patek Philippe, Audemars Piguet, Breguet… Su colección posee piezas para todos los gustos y customizadas hasta el más mínimo detalle. Además, cuando un modelo le gusta y le resulta práctico, no duda en llevarlo incluso en sus sesiones de entrenamiento más duras. Las piezas que normalmente lleva son solo asequibles a los bolsillos de unos pocos privilegiados, pues no bajan de los 50.000 euros las más económicas. Sin embargo, parece que con el inicio del nuevo año ha ampliado su presupuesto cuantiosamente, y no, no lo decimos nosotros, nos basamos en una de sus últimas publicaciones de Instagram, red social en la que no duda en compartir sus nuevas adquisiciones.
En este caso el Astronomia Tourbillon Baguette de Jacobs & Co. ha sido el modelo elegido por el Campeón de Peso Pluma de la UFC. Tan emocionante le ha resultado el momento de comprarlo que ha inmortalizado desde su entrada a la joyería a múltiples selfies y vídeos en los que se puede apreciar desde todos los ángulos.
Su precio ronda el millón de euros y viendo los materiales de los que está compuesto no nos extraña. Nada más y nada menos que 342 diamantes en el exterior y otros 80 en la maquinaria, otra cuantiosa cantidad de zafiros y oro blanco. La esfera refleja el universo y los planetas y muestra cada uno de sus elementos visibles en constante movimiento mediante el control ejercido por el corazón de sus tres ejes tourbillon, que evidencian una preciosa pantalla orbital con una versión artística de las horas y los minutos.
Pero uno de los puntos más llamativos de este reloj se encuentra en el interior de la esfera, ya que cuando se presiona un botón aparece una pareja en actitud amorosa y dos cisnes. La exclusividad de este modelo es tal, que solo se han fabricado 9 unidades, de ahí que su compra se haya convertido en todo un ritual.
En cuanto a la firma, aunque es relativamente nueva -ya que posee solo 35 años de historia- utiliza las técnicas artesanales con los mejores maestros relojeros del mundo para dar con diseños que trascienden a la moda y a las tendencias que se convierten en piezas atemporales. El modelo de McGregor por muy costoso que parezca no es el más caro de la firma, pues hay otro que cuesta el doble, 2 millones de euros: el el Rasputin Tourbillon. Pero tendremos que esperar para comprobar si McGregor decide añadirlo a su colección…
Del Seiko de cien euros al Rolex de 7.500, así son los relojes de Joe Biden
Joe Biden y su Datejust han dado, y siguen dando, que hablar. El Rolex de acero azul escogido por el presidente de los Estados Unidos está provocando un largo debate en los foros relojeros pero también en los más diversos de comunicación.
Para algunos es un símbolo de ostentación más teniendo en cuenta que en un significativo día de campaña lució un Seiko 7T32-6M90 Chronograph Seamaster Diver300M que ronda los cien dólares.
El Datejust de Joe Biden, una pieza muy especial que cuesta 7.500 euros y que lució en la ceremonia de investidura Rolex
Para otros, todo lo contrario, porque en lugar de escoger el Day-Date en oro amarillo que han llevado buena parte de los mandatarios norteamericanos, se decantó por un Rolex también pero más modesto y de aluminio. Antes solo lo había lucido Eisenhower, a quien muchos recuerdan con el Day-Date de oro por la portada de la revista Life de 1952, pero que el día en que juró el cargo, cuatro años antes, lo hizo con un Datejust con sus iniciales en el fondo de la caja.
Precursor Eisenhower también juró el cargo con un Datejust y no con el ‘reloj de los presidentes’
Pues eso mismo hizo Biden. Ajustarse un Datejust de acero en la mano que posó sobre la Biblia para jurar su cargo. Se trata de un modelo novísimo, con el bisel liso (en lugar del típico estriado) y el tradicional brazalete Jubilee y esa esfera en un encendido tono azul también muy novedoso. Unos dicen que es un obsequio de Rolex. Otros que es el regalo que la primera dama le hizo al presidente por Navidad.
El primer presidente en llevar un reloj en su investidura fue Franklin Delano Roosevelt (1933-1945). A partir de entonces se inició esta costumbre de marcar ideas y terreno con un reloj de pulsera en que Rolex tiene mucho que decir. El primero en recibir una pieza especial de la manufactura suiza para conmemorar su investidura fue John F. Kennedy.
Excepción Kennedy se deshizo del Day-Date , prefería el Omega que le había regalado Marylin
JFK también recibió su Day-Date en oro amarillo pero, dicen, nunca llegó a estrenarlo. Usó Cartier, pero sobre todo el Omega Ultra Thin que también usó al jurar el cargo puestos que fue un regalo por su 45 cumpleaños, el 29 de mayo de 1962 (el día de la mítica canción Happy birthday, Mr. President), que le hizo ni más ni menos que Marilyn Monroe. Por eso en su reverso se podía leer la dedicatoria ‘Jack, con amor, como siempre, Marilyn’.
El Day-Date de oro amarillo con brazalete ‘president’, el reloj de los presidentes Rolex
Uno de los ayudantes del presidente, Kenneth O’Donnell, recibió la orden de deshacerse de ese reloj que finalmente fue subastado (en Alexander Autographs) y adquirido por un comprador anónimo que pagó 120.000 dólares.
El ‘desprecio’ de Kennedy no supuso ningún problema para que la historia del ‘reloj de los presidentes’ tuviera su continuidad. Porque Lyndon B. Johnson hizo exactamente lo contrario, no se quitó nunca su Day-Date, como desde entonces han venido haciendo sus sucesores en la Casa Blanca.
La pregunta ahora es si Joe Biden va a iniciar una nueva era en este sentido. Y podría ser así porque su Datejust es el modelo más importante de la manufactura. Se llama así porque este reloj automático y hermético indica la fecha en la ventanita ubicada en el índice de las 3 renovando con su lanzamiento en 1945 la manera de mostrar la hora (se indicaba mediante una aguja que señalaba los días inscritos en la esfera) y mejorándola todavía más en 1953 su visibilidad al incorporar la lente Cyclops sobre el fechador.
Omega Speedmaster Dark Side of the Moon. Otras Fuentes
El reloj de Joe Biden cuesta 7.500 euros y se trata del más icónico de Rolex. La manufactura suiza apenas ha introducido cambios estéticos en esta pieza realizada en acero Oystersteel (resistente a la corrosión, al desgaste y a los golpes aunque sí técnicos puesto que hoy en día son más precisas que nunca avaladas con el certificado de Cronómetro Superlativo.
Relojes suizos Omega, proveedora de la NASA, la firma suiza más recurrente en la colección de Biden
Biden escogió el Rolex pero seguramente no será el único que va a lucir el presidente que además de ese Seiko del que también se habló muchísimo en los foros, sacó a lucir dos piezas muy importantes de Omega, la firma proveedora de relojes para le programa de vuelo espacial humano de la NASA .
Se trata del Speedmaster y el Seamaster, dos relojes que el demócrata lleva con regularidad y lució casi a diario sobre todo mientras ocupó el cargo de vicepresidente con Obama, quien por cierto tampoco llevó el ‘reloj de los presidentes’ pero sí un Rolex. Se trata del Cellini Date, de 14.700 euros, en oro blanco de 18 quilates y caja de 39 milímetros.
Obama, con el Rolex Cellini que llevó también al jurar su cargo como presidente Reuters
Un reloj elegante y clásico. La pieza más cara de todas las que se han visto en la muñeca del ex presidente que sobre todo usó el Jorg Gray (cuesta alrededor de 300 euros) que en tiempos de crisis se convirtió en toda una declaración de intenciones y, además, lo recibió como regalo de cumpleaños en 2007 por parte del servicio secreto.
Reverso grabado del Rolex Cellini de Obama .
En cuanto a Donald Trump llevó tanto ese reloj de oro de los presidentes como otras piezas mucho más importantes como el Vacheron Constantine Historiques Ultra Fine 1968 (planísimo, de sólo 5,5 milímetros) de oro rosa así como algunos de su propia colección Donald J. Trump Signature Collection, lanzada en 2005 y retirada por falta de éxito del mercado solo un año después.
Kamala Harris escogió el Cartier Ballon Bleu, inicialmente pensado para hombres, para hacer su propia declaración de intenciones